El Fondillón, vino dulce que se elabora en Alicante, fundamentalmente en la ciudad de Monóvar, aunque su origen que data del siglo XV, este vino procedía de las localidades de Muchamiel y San Juan, en la antigua Huerta de Alicante, cuyos viñedos fueron desapareciendo de estas zonas.

En aquella época, las tierras se arrendaban a los agricultores hasta que la viñas dejaran de producir, por ello, los agricultores, para no perder los derechos de explotación de las tierras, seguían manteniendo las cepas viejas.

En estas cepas, su producción era menor, por ello no empleaban peones y dejaban su recolección al final de la temporada para personalmente recolectarlas los mismos agricultores.

Esta tardanza, tenía como consecuencia, una sobre maduración de la uva y una concentración de azucares muy propio de este tipo de vino.

La uva, de la variedad monastrell, se deja pasificar durante un par de semanas, al sol, en las terrazas de las bodegas, posteriormente prensarla y luego fermentarla en un proceso que duraba aproximadamente unos 30 días.

Seguidamente, ese fondo, se utilizaba nuevamente, para la cosecha siguiente. El proceso de crianza del fondillón dura un mínimo de diez años antes de ser comercializado.
En estas cepas, su producción era menor, por ello no empleaban peones y dejaban su recolección al final de la temporada para personalmente recolectarlas los mismos agricultores.

Esta tardanza, tenía como consecuencia, una sobre maduración de la uva y una concentración de azucares muy propio de este tipo de vino.

La uva, de la variedad monastrell, se deja pasificar durante un par de semanas, al sol, en las terrazas de las bodegas, para posteriormente prensarla y luego fermentarla en un proceso que duraba aproximadamente unos 30 días.

De este proceso, se obtiene un caldo de 18º aproximadamente que se posaba en el fondo de los barriles que habían ido vaciándose durante la comercialización y venta del vino de esa temporada.

De ahí toma el nombre de "fondillón", del fondo de los barriles, el poso que había dejado en los barriles, la cosecha comercializada en esa temporada.

Seguidamente, ese fondo, se utilizaba nuevamente, para la cosecha siguiente. El proceso de crianza del fondillón dura un mínimo de diez años antes de ser comercializado.